SANTO DOMINGO.///.El ingeniero Geólogo Osiris de León, destacó que muchos ingenieros y arquitectos que ejecutan obras para el Estado Dominicano no están respetando el Código de Sismo Resistencia para la construcción de infraestructuras sensibles como son: escuelas, hospitales, iglesias y puentes, y se están olvidando de que en cualquier momento en Rep. Dominicana podría ocurrir un terremoto como el ocurrido el Haití el 12 de enero del 2010, donde hubo más de 316,000 muertes, 350,000 heridos y más de 400,000 edificaciones colapsadas, entre ellas 5,000 escuelas.
Manifestó que una de las grandes preocupaciones que tenemos en la República Dominicana es que aunque sabemos que somos un territorio de muy alta sismicidad, muchos de nuestros principales núcleos urbanos están levantados sobre suelos flexibles que amplifican los daños sísmicos, como los suelos del Cibao, y vemos que aquí construimos donde quiera, y como quiera, sin tomar en cuenta que las estructuras sensibles como escuelas y hospitales deben ser construidas obligatoriamente con un criterio de sismo resistencia, para que cuando ocurra el próximo terremoto todas esas estructuras resistan las fuerzas cortantes generadas por las vibraciones excesivas de los suelos flexibles, las que amplifican las fuerzas sísmicas y producen colapsos de estructuras.
El geólogo y ambientalista afirmó que lo ideal es construir sobre rocas rígidas que "blindan las estructuras", pero que cuando es obligatorio construir escuelas y hospitales sobre suelos flexibles entonces debemos cortar el suelo de peor respuesta sísmica para cimentar la estructura sobre el material más firme, con lo cual logramos mejorar las condiciones de respuesta sísmica del suelo, diseñar los principales elementos estructurales de esa escuela u hospital para que resistan las fuerzas máximas que se van a generar al momento de ocurrir un terremoto, y de ser posible, utilizar aislantes sísmicos, y que todo eso debía estar bien claro a la hora de construir sobre suelos flexibles, pero que al parecer para muchos constructores eso no está muy claro, y aquí en ninguna escuela ni hospital se utilizan aislantes sísmicos entre las zapatas y las columnas.
Entiende que aquí predomina un mismo diseño de escuelas que se construye indistintamente de que el lugar sea roca o sea suelo, lo cual es un grave error, pero que el país debía disponer de cinco o seis diseños distintos para escuelas y hospitales en función de los tipos de suelos, y que una vez que se decida construir una escuela o un hospital en un determinado lugar, primero se evalúe la respuesta sísmica del suelo mediante medición de las velocidades de propagación de las ondas sísmicas de corte, que son ondas de cizallamiento, y una vez conocido el espectro de respuesta sísmica de ese suelo podamos escoger el modelo de diseño que mejor aplique para garantizar la sismo resistencia estructural sobre ese tipo de suelo.
De León exhortó a la Sociedad Dominicana de Sismología e Ingeniería Sísmica, al Colegio Dominicano de Ingenieros Arquitectos y Agrimensores -CODIA-, al Ministerio de Educación, al Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones, y a la Oficina de Evaluación Sísmica y Vulnerabilidad de Infraestructuras y Edificaciones- ONESVIE- a que trabajemos todos juntos para definir cómo vamos a construir nuestras escuelas y hospitales sobre suelos arcillosos, limosos y arenosos, que amplifican el espectro sísmico, y cómo podemos construir nuestras escuelas y hospitales sobre rocas rígidas de excelente comportamiento sísmico.
El geólogo Osiris de León afirmó que durante un terremoto las escuelas y los hospitales deben comportarse como búnkers que protejan a los estudiantes, a los maestros, a los médicos, a los pacientes y a los empleados.
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