Cuidado con las reservas internacionales del Banco Central (OPINION)

Las reservas internacionales de un país son los recursos guardados en el Banco Central para hacer frente a los compromisos internacionales de dicho país. Estos activos monetarios normalmente están expresados en monedas fuertes como el dólar, el euro, la libra esterlina o el yuan. También pueden estar expresados en metales preciosos como el oro y la plata.

El FMI define define a los activos de reserva como los activos externos que están disponibles de inmediato y bajo el control de las autoridades monetarias para satisfacer necesidades de financiamiento de la balanza de pagos, para intervenir en los mercados cambiarios a fin de influir sobre el tipo de cambio y para otros fines conexos como el mantenimiento de la confianza en la moneda y en la economía, así como servir como base para el endeudamiento externo.

Estas reservas internacionales pueden ser brutas o netas. No obstante, para fines de análisis del comportamiento monetario de una economía son usadas las reservas internacionales netas, que son en realidad las que están disponibles para cubrir los compromisos externos de la economía en el corto plazo como es el pago de intereses de la deuda y también pagar las importaciones de bienes y servicios.
Otro uso muy frecuente de las reservas internacionales netas es para mantener la estabilidad en el precio de la moneda local o tipo de cambio.

Según cifras del Banco Central, las reservas internacionales netas de la economía dominicana han disminuido en unos Mil millones de dólares desde enero a junio 2024. Es una cantidad muy elevada en tan solo seis meses, pero no es que sea muy preocupante porque todavía son suficientes para cubrir seis meses de importación y los demás compromisos externos. A junio todavía ascienden a 13,384.9 millones de dólares, según el Banco Central.

Sin embargo, debemos ser muy cuidadosos porque al echar un vistazo a nuestra historia económica observamos que desde 1985 hasta 1990 las reservas internacionales netas del Banco Central fueron negativas y fue a partir de 1991, después de ser iniciadas las reformas estructurales, cuando estas volvieron a ser positivas.

Recordemos que de 1985 a 1990 la economía dominicana estuvo afectada por alta inflación y fuerte devaluación monetaria. De seguro que nadie quiere repetir esa historia. Y es sólo por esa razón que nos permitimos decir a todo el país que debemos tener mucho cuidado con las reservas internacionales del Banco Central.