Con diversos actos y la asistencia de autoridades civiles y militares, fue celebrado el pasado viernes 7 de noviembre, el 206 aniversario de la Batalla de Palo Hincado, donde el brigadier Juan Sánchez Ramírez, oriundo del municipio de Cotuí, comandó las tropas dominicanas de esa gesta heroica.
En las palabras de bienvenidas, la Licda. Teresa Ynoa, gobernadora civil de esta provincia, dijo que en Palo Hincado los dominicanos lucharon por mantener su nacionalidad y por preservar su identidad, ya que con la ocupación francesa que se inicia en 1802, los franceses pretendían hacer desaparecer una nación, la cual se había conformado en un proceso de más de tres siglos, con todos los elementos que componen la nacionalidad, como: el origen, la historia, la lengua, la religión y las costumbres. Por esa razón en la Reconquista se reafirma la dominicanidad.
A continuación una parte importante del discurso de la gobernadora de Sánchez Ramírez:
Hoy celebramos con orgullo el 206 aniversario de aquella gesta heroica que lideró nuestro héroe, que hoy descansa en el altar de la Patria junto a Duarte, Sánchez, Mella, Luperón y otros héroes nacionales.
El día 6 de noviembre, apreciando que el paraje de Palo Hincado, a media legua al oeste de la población del Seibo, reunía buenas condiciones, llevó allí su gente y dictó sus órdenes para esperar a pie firme al enemigo.
Desde aquel lugar arengó a la tropa. Le advirtió que la acción iba a ser decisiva, puesto que viniendo al frente de la expedición enemiga el propio gobernador Ferrand, con lo más granado de las fuerzas de que disponía, su derrota significaría el triunfo de la compañía.
Recomendó asaltar al enemigo con armas blancas después de la primera descarga de fusiles, para evitar el efecto de la mejor fusilería y táctica de los franceses. Terminó la arenga con su famosa frase "Pena de la vida al que volviere la cara atrás, pena de la vida al tambor que tocare retirada, y pena de la vida al oficial que lo mandare aunque sea yo mismo"
En esta forma obligó a todos, incluso él, a pensar que era mejor morir peleando que deshonrosamente fusilado.
Este choque cuerpo a cuerpo fue sangriento. Diez minutos de pelea bastaron para que el campo quedara cubierto de cadáveres franceses.
Viendo deshechos sus batallones, el general Ferrand dispuso el retorno precipitado a Santo Domingo con un grupo de oficiales supervivientes.
En esta forma se libró la célebre batalla de Palo Hincado el 7 de noviembre de 1808.
Lo que parecía imposible se hizo realidad.
A si Cada día se libran nuevas batallas en nuestras vidas pero Dios nos da las fuerzas para salir victoriosos de cada una de ellas. Hoy en nuestro país se le ha ganado la batalla al analfabetismo que atrasaba a nuestro pueblo, estamos luchando para que tengamos una educación de calidad mediante la revolución educativa que lleva a cabo el presidente de la república Lic. Danilo Medina.
Al describir el sentimiento popular tras la muerte de Sánchez Ramírez, José Núñez de Cáceres escribió: “Sólo se ven y oyen por las calles lágrimas y sollozos del más vivo dolor por la pérdida del Padre de la Patria”.
Hoy nuestra provincia lleva con orgullo su nombre, el que estamos llamados a enaltecer ä todos los Sánchez Ramirenses.
¡Que viva Juan Sánchez Ramírez ¡
¡Que viva la dominicanidad ¡
Manos a la obra
Muchas Gracias
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