El presidente del Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (CODUE), Fidel Lorenzo Merán, dijo que la propuesta de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) de eliminar las disposiciones de la Ley 169-14, de Naturalización, es contradictoria a los intereses de la soberanía del pueblo dominicano.
“Las medidas que implica el informe de la CIDH son contradictorias a los intereses de la soberanía del pueblo dominicano”, puntualizó Lorenzo.
Se recuerda que el pasado martes el ministro de Relaciones Exteriores, Miguel Vargas, rechazó la misma propuesta de la CIDH, de dejar sin efecto las disposiciones de la Ley 169-14 o Ley de Naturalización, alegando que la misma se contempló en el marco de un gran consenso nacional.
La Ley 169-14 o Ley de Naturalización Especial aprobada por el Congreso Nacional, permite a los extranjeros en condición migratoria irregular poder regularizar su situación, así como a los descendientes de extranjeros en condición migratoria irregular, bajo la demostración de que trabajaban en el país.
El pastor evangélico agregó que esta ley tuvo su efecto en buscar salida a la problemática de indocumentados en el territorio nacional. “A pesar de promover esa ley y establecer prorrogas para que las personas pudieran documentarse, acceder a una residencia o estatus legar, fueron pocos los que hicieron el proceso”, dijo Fidel Lorenzo.
Expresó que la CIDH pretende una apertura de la frontera dominico haitiana para recibir a todo indocumentado, y entonces así responsabilizar al país de ofrecer los documentos de nacionalidad.
El pastor instó a que la Comisión Interamericana debe hacer una investigación en el territorio haitiano que determine la cantidad de personas apátridas y exigir al gobierno de esa nación el debido registro de sus nacionales.
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