Por Alejandro Jerez Espina
El acceso al agua dulce y su adecuado
saneamiento es un recurso fundamental para la sobrevivencia humana y animal. Su manejo racional impactará en el desarrollo y crecimiento
económico de los paises en la medida en que su oferta disponible permite la
producción agrícola, pecuaria, industrial y agroindustrial de manera
sostenible.
Desde los primeros tiempos los asentamientos
humanos se concentraron en las cercanías de ríos, lagos, arroyos y cañadas,
generándose por la sola actividad humana una interacción, en algunos casos, poco
amigable entre hombre y recurso agua que termina por afectar la calidad y
disponibilidad de este recurso tan preciado.
A lo anterior se suma la contaminación de
las fuentes de agua, ocasionada por la deforestación, la explotación minera e
industrial, cuando la misma no implementa controles adecuados para el manejo y
saneamiento de los desechos sólidos y líquidos que en un porciento elevado
terminan en los ríos.
Esta situación se agrava cada día, no sólo
con los efectos de la contaminación, el aumento descontrolado y sin
planificación de la población, sino también, con las consecuencias del cambio
climático que se traducen en aumento del nivel del mar, tormentas más poderosas
y de mayor duración, inundaciones, sequías, incendios, tornados y desaparición
de ecosistemas
Se estima que unos 1800 millones de
personas, en todo el mundo, toman agua contaminada con residuos de heces
fecales, con el riesgo de contraer
cólera, disentería, fiebre tifoidea y polio, pero un número mayor de seres humanos consumen agua que
les llega a través de sistemas de distribución vulnerables a la contaminación,
a esto se agrega que uno de cada tres personas no dispone de saneamiento mejorado
y una de cada siete defeca al aire libre, según el Programa Conjunto OMS/UNICEF
de Monitoreo del Abastecimineto de Agua y Saneamineto.
Para llamar la atención sobre el problema del acceso al agua dulce en calidad
y cantidad suficiente y armonizar políticas públicas de solución al problema
con miras al año 2030, los paises
signatarios de los Objetivos de Desarrollo Sostenibles,ODS, plantean en el objetivo
No.6 garantizar la disponibilidad de agua, su ordenación sostenible y
saneamiento para todos.
En vista de la importancia que tiene para la
salud, la calidad de vida y el desarrollo humano el acceso a fuentes de agua
dulce en cantidad y calidad adecuada, la Asamblea
General de las Naciones Unidas reconoció en julio del año 2010 como un derecho
humano, el acceso a una cantidad de agua suficiente para el uso doméstico y
personal, que sea segura, aceptable, asequible y accesible físicamente.
En
la República Dominicana el derecho humano de acceso al agua y saneamiento tiene
el rango constitucional, por estar consignado de manera taxativa en nuestra
Carta Magna, por lo tanto, se cuenta con un marco legal adecuado, pues, su
cumplimiento no sólo debe ser reconocido sino garantizado por el Estado
Dominicano.
El
País cuenta con unas seis regiones hidrográficas, entre la que se destaca la
Región Yuna con un índice de escasez de un 56% por ciento, frente al promedio
nacional de un 53% por ciento proyectado al año 2025, por lo que partiendo de
lo anterior la presión hídrica de la Region Yuna está por encima del promedio
nacional y es sumamente elevada, conforme a estadísticas del Instituto Nacional
de Recursos Hidráulicos, INDRHI.
La
provincia Sánchez Ramírez tiene una gran disponibilidad de agua dulce en sus
ríos y embalses que demanda un manejo racional y eficiente de ese recurso para
satisfacer la creciente demanda en la agricultura, industria, minería, comercio
y uso doméstico.
En
la dirección de resolver el problema del acceso al agua potable de los habitantes de la provincia Sánchez Ramírez, sometimos una
Resolución que fue aprobada por el Pleno de la Cámara de Diputados que solicita
al Honorable Presidente de la República Dominicana, que instruya al Director de
INAPA, la realización de un estudio de
factibilidad, la construcción de un embalse en la cuenca del Río Chacuey y la
construcción de un Acueducto Múltiple para los municipios de Fantino, Cevicos, Villa La
Mata y Cotuí.
Y
para abordar el desafío relacionado a la administración y manejo eficiente del recurso
agua y saneamiento, sometimos a la Cámara de Diputados el Proyecto de Ley que crea
la Corporación de Acueducto y Alcantarillados de la Provincia Sánchez Ramírez,
CORASAR, que dará solución a ese problema de manera definitiva, en beneficio de
un pueblo que reclamada de sus funcionarios públicos un mayor esfuerzo y
compromiso.

No hay comentarios:
Publicar un comentario