SAN FRANCISCO DE MACORIS. El Primer Tribunal Colegiado de esta ciudad puso en libertad anoche a los imputados del asesinato de la estudiante universitaria Gisette Batista, ocurrido el 25 de noviembre del 2008 en Las Malenas.
Al tomar la decisión cerca de las 9:00, los magistrados Saturnina Rojas, Pascual Arias y Ramón Matías Rodríguez estimaron que las pruebas presentadas contra Yomary Barrera Jerez y Luis Modesto Sosa Reyes fueron insuficientes y citaron las contradicciones del testigo de cargo Fray Luis y la ausencia de pruebas materiales que hubiesen podido comprometer a los imputados con el crimen.
En una sala llena, los parientes de la joven protestaron por la sentencia y acusaron a los imputados de “comprar” los testigos.
Los magistrados explican que declararon inocentes a Barrera Jerez y Sosa Reyes, en razón de que las pruebas presentadas en su contra fueron inconsistentes, débiles, no creíbles no suficientes e incapaz de destruir el estado de inocencia de los imputados.
En el capítulo tercero de la sentencia ese ordena el cese de la medida de coerción impuesta a Barrera Jerez y Sosa Reyes, y su libertad inmediata del salón de audiencia en cumplimiento a lo establecido en el artículo 337, parte final del Código Procesal Penal.
En el capítulo 5 decidieron que las costas penales se declaren de oficio, mientras que en relación a la constitución de actor civil intentada por Zoraida Abreu Díaz y Martín Batista de Jesús, padres de la víctima, el fondo de la misma se rechaza por no habérsele probado el hecho penal.
El testigo estrella del ministerio publico, Fray Luis Sosa Paulino, quien aseguró que fue contratado por 150 mil pesos para matar a la joven universitaria, dijo que fue amenazado por los acusados
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